SecurityInside Live: Mundo Hacker Day 2017
Al igual que el año pasado, me voy al evento «Mundo Hacker Day 2017» para asistir en primera persona a las interesantes charlas que grandes expertos en seguridad van a ofrecer.
Al igual que el año pasado, me voy al evento «Mundo Hacker Day 2017» para asistir en primera persona a las interesantes charlas que grandes expertos en seguridad van a ofrecer.
Supongo que todos conocéis Netflix a estas alturas, el servicio VOD con suscripción mensual que aterrizó en España hace unos meses y ya es todo un éxito.
Pero, además de ser una forma estupenda de ver películas y series, puede ofrecernos mucho que aprender gracias a lo que algunos (yo no :D) llaman pornografía tecnológica.
Netflix es una de esas empresas que se rodea de los mejores ingenieros para poder ofrecer un servicio con calidad por encima de lo normal. En ese sentido, leer de forma regular «The Netflix Tech Blog» es altamente recomendable.
Que profesionales tan altamente cualificados como los que trabajan en Neflix dediquen una parte de su tiempo a contarnos cómo hacen las cosas, es algo de agradecer. Vivimos en un mundo en el que estamos obligados a aprender de forma contínua y este tipo de lecturas nos abren la mente a nuevas formas de hacer las cosas.
Puedes encontrar temas tan interesantes como:
Y sobre todo, en general de elementos de Amazon WS (unos servicios con los que suelo trabajar tal y como os conté en Controla lo que hacen tus usuarios con Amazon WS IAM (parte 1) y Controla lo que hacen tus usuarios con Amazon WS IAM (parte 2)).
Revisando esto, me he encontrado con una solución desarrollada por el equipo Netflix que tiene por objetivo monitorizar y analizar la seguridad de los servicios de AWS.
Se trata de un desarrollo propio que ofrecen como open source y que nos permite monitorizar la configuración de los servicios EC2, RDS, S3 e IAM. Cualquier cambio que se realice sobre ellos quedará registrado para que tengamos el control de todo lo que sucede.
Está pensada para correr sobre una máquina Linux y almacenar la información en una PostgreSQL. A nivel tecnológico está escrita en Python utilizando el framework Flask, utilizando datos JSON servidos mediante una API REST.
Casos de uso típicos serían:
Para conseguir esto, Security Monkey cuenta con tres componentes principales:
Una vez lo tengamos funcionando podremos acceder mediante su interfaz web, configurar los elementos que queremos monitorizar y ver todo en detalle.
¿Te ha gustado tanto como a mi? Entonces descarga el proyecto desde su repositorio y coméntanos qué tal tu experiencia. Yo lo haré en un post en el que os mostraré el proceso de instalación, configuración y uso. De momento, esto es todo, espero que os esté resultando interesante.
Como siempre digo, si ves algún error, no estás de acuerdo con lo que cuento o quieres hacer alguna aportación, no dudes en pasarte por los comentarios.
En la primera parte de esta serie de post relativos a la gestión de usuarios (IAM) en Amazon WS, estuvimos conversando sobre la forma en la que conceder permisos de forma ordenada y sencilla, así como algunos consejos para tener el control de todo lo que ocurre. Si no lo recuerdas, no dudes en echarle un vistazo antes de seguir.
Algo realmente importante en este panel IAM es el control sobre la cuenta root. No se aconseja utilizar dicha cuenta y Amazon nos anima en el panel de control a activar autenticación multifactor (MFA).
Como se puede ver en este ejemplo, uno de los checks importantes de seguridad es activar ese MFA. El motivo es sencillo, añadir una capa extra de seguridad al acceso con el usuario que tiene capacidad para hacer cualquier cosa, incluso eliminar la propia cuenta.
De esta forma, para entrar como root, se necesitará la contraseña (algo que el usuario sabe) y otro elemento que ahora veremos (algo que el usuario tiene). En mi caso, ese elemento es un código temporal que puede ser gestionado de diferentes formas:
Básicamente, podemos optar por soluciones software o hardware. En mi caso particular, estoy utilizando la primera mediante apps para móviles. ¿El motivo? Hoy en día todo el mundo tiene smartphone, todos lo llevan siempre a mano y casi todos (en esto parece que la concienciación ha servido) tienen un patrón de bloqueo. Esto hace que «lo que el usuario tiene» esté mejor controlado que un dispositivo o tarjeta que sólo usa para acceso puntual.
De esta forma, si alguien pierde el teléfono puede avisar de inmediato para que su usuario sea puesto en cuarentena hasta que se renueven tanto la contraseña como el sistema mfa.
Las opciones de apps son estas:
Por utilizar siempre la misma, recomiendo Google Authenticator para Android o iOS. Sólo tenemos que acceder a la pestaña «Security Credentials» del usuario y pulsar sobre la opción «Manage MFA Device».
Al seleccionarlo, se inicia el proceso. En nuestro caso, seleccionamos dispositivo virtual (app para móvil):
Únicamente tendríamos que arrancar la aplicación y escanear el qr que aparece en pantalla. Tras hacerlo, se nos piden dos códigos consecutivos para comprobar que todo funciona correctamente y listo.
La próxima vez que entremos en el panel de control de Amazon WS con este usuario, se nos pedirá un código que podremos consultar en nuestra app.
De esta forma, los pasos recomendables para la gestión de usuarios en Amazon WS IAM se podrían resumir en:
Por supuesto, recuerda que el MFA también puede ser activado para el resto de usuarios. Al principio se mostrarán reticentes a utilizarlo, pero ya sabes que concienciar y hacer entender que ciertas medidas son necesarias para tratar de asegurar los activos de la empresa es parte fundamental de nuestro trabajo.
De momento, esto es todo, espero que os esté resultando interesante. Como siempre digo, si ves algún error, no estás de acuerdo con lo que cuento o quieres hacer alguna aportación, no dudes en pasarte por los comentarios.
En proyectos pasados y actuales he tenido que lidiar con los servicios cloud de Amazon, los conocidos como Amazon Web Services. Para los que no los conozcan, son un conjunto de servicios de computación, almacenamiento, base de datos, redes, análisis… que permiten montar infraestructuras complejas, eficientes y escalablas a precios muy competitivos (se paga por uso).
En un principio me tocó montar la red, servidores, servicios y bases de datos. Ahora ando desde otro punto de vista, el de tratar de asegurar la infraestructura para que la continuidad de negocio de mi trabajo actual no se vea comprometida. La puerta de entrada son los usuarios y de eso vamos a hablar hoy.
Para gestionar el acceso a los recursos, AWS cuenta con un servicio llamada IAM (Identity & Access Management) que permite gestionar el acceso a los recursos en base a diferentes identidades:
Usuarios: es una entidad individual, una persona que utiliza recursos. Cuando creamos un usuario, le podemos dar acceso a la consola de administración o a la api para que pueda interactuar con aquello que deseemos de AWS mediante políticas de uso.
Grupos: se utilizan para agrupar usuarios que tienen características similares y, por tanto, permisos similares. Normalmente se usan para crear departamentos en los que todos los usuarios tienen que tener acceso a los mismo recursos. Editar, añadir o eliminar una política al grupo, afecta inmediatamente a todos los usuarios del mismo.
Roles: son parecidos a los usuarios, pero de forma inpersonal. Son permisos que se conceden para llevar a cabo determinadas tareas puntuales. Se suelen usar para asignar a máquinas o procesos que se lanzan de forma automática o incluso aquellas que se lanzan de forma manual sin importar el usuario que lo hace (no es el usuario el que tiene los premisos, es el popio proceso).
Para eso están las policies, que son reglas que se aplican para cada servicio y que pueden contener todo tipo de detalle para hacerlas completamente a medida. Una policy tiene un aspecto similar a esto:
{ "Version": "2012-10-17", "Statement": [{ "Effect": "Allow", "Action": "ec2:Describe*", "Resource": "*" } ] }
Tener cierto control y destreza a la hora de escribir estas policies es complicado, por eso Amazon nos pone a mano dos recursos interesantes:
A la hora de aplicarlas sobre un usuario o grupo, podemos optar por hacerlo de dos formas:
Con todo esto, una posible situación sería asignar grupos por departamento y entorno de desarrollo, asignando las policies necesarias para cada zona concreta. Por ejemplo:
Puesto que un usuario puede pertenecer a varios grupos, no habría problema en asignar a «Usuario1» a los grupos «DEV» y «PRE» del «Departamento1».
Cuando todo esto empieza a crecer, utilizo un pequeño script que me lista todos los usuarios, así como las políticas que tiene asignadas como grupo o individualmente. Me sirve para exportar rápidamente esa información y poder ver en papel la foto actual de los permisos. Si utilizas la consola, tienes que entrar uno a uno y es un poco coñazo.
Lo único que hago es tirar consultas sobre la API para mostrar, de forma ordenada, la información que necesito.
########################################################################################## # # File: iam-list-users-policies.py # Author: Cristobal Espinosa # # https://boto3.readthedocs.org/en/latest/reference/services/index.html # ########################################################################################## # Imports ################################################################################ import boto3 from colorama import init, Fore, Style ########################################################################################## # Initial values ######################################################################### init(autoreset=True) step = False # Set as True to step by step view ########################################################################################## print print Fore.GREEN + '-- IAM POLICIES CONTROL' print Fore.GREEN + '----------------------------------------------------------------------------------' print client = boto3.client('iam') user_list = client.list_users() # List users for user in user_list['Users']: print Fore.YELLOW + '[**] ' + Fore.WHITE + user['UserName'] + ':' # List user inline policies print Fore.YELLOW + '\t[*] ' + Fore.WHITE + 'User inline policies:' user_policies = client.list_user_policies(UserName = user['UserName']) for policy in user_policies['PolicyNames']: print '\t\t- ' + policy print # List user managed policies print Fore.YELLOW + '\t[*] ' + Fore.WHITE + 'User managed policies:' user_policies = client.list_attached_user_policies(UserName = user['UserName']) for policy in user_policies['AttachedPolicies']: print '\t\t- ' + policy['PolicyName'] print # Get user groups user_groups = client.list_groups_for_user(UserName = user['UserName']) print Fore.YELLOW + '\t[*] ' + Fore.WHITE + 'User groups and associated policies:' for group in user_groups['Groups']: group_policies = client.list_attached_group_policies(GroupName = group['GroupName']) for group_policy in group_policies['AttachedPolicies']: print '\t\t- [' + group['GroupName'] + '] -> ' + group_policy['PolicyName'] print print Fore.GREEN + '----------------------------------------------------------------------------------' print if step: raw_input("Press Enter to continue...") print
Me gustaría trabajar en ampliar este script para que sea capaz de avisarme de cambios tanto en policies como en el contenido de las mismas, de forma que si un usuario «obtiene cambios fuera de control», pueda enterarme lo antes posible.
El resultado de este código es algo así:
Lo que podéis ver aquí es el modo paso a paso (step = True) con los resultados del primer usuario (el nombre es lo que hay borrado junto a [**]). Se ve rápidamente que no tiene policies de tipo inline o managed y que, todo lo que tiene, le llega por pertenecer a dos grupos del mismo departamento y diferente entorno (DEV y PRE). Las policies asociadas a cada grupo aparecen a la derecha del mismo.
Como véis, un script muy sencillo, pero que me permite exportar rápidamente la información que necesito para verificar si algún usuario tiene permisos que no debe o pertenece a algún grupo equivocado.
De momento, esto es todo, en la continuación de esta entrada hablaremos del usuario root y de la autenticación con segundo factor. Espero que os esté resultando interesante y, como siempre digo, si ves algún error, no estás de acuerdo con lo que cuento o quieres hacer alguna aportación, no dudes en pasarte por los comentarios.
La tecnología es ya algo que forma parte de nuestro día a día tanto a nivel personal como empresarial. Mi hija maneja el smartphone y la tablet con soltura (mucho mejor que sus abuelos), algo extensible a la mayoría de personas menores de 40 años.
En el mundo de hoy es impensable una empresa u organización que no tenga una fuerte base tecnológica, estemos hablando de base de datos de clientes, soluciones ERP o una simple (o compleja) página web.
Si echamos un vistazo a la situación actual es España, nos encontramos con que la inmensa mayoría de las empresas que nos rodean tienen menos de 250 trabajadores, lo que se conoce como PYME (Pequeña Y Mediana Empresa):
En este escenario podemos ahondar un poco más para darnos cuenta de que el uso de la tecnología es básico en este tipo de empresas:
Sin embargo, cuando nos acercamos a evaluar las medidas de seguridad, planes de contingencia o de continuidad de negocio vemos con poco asombro (lamentablemente) que la situación es precaria.
Desde nuestro punto de vista no hay más que ver los números para darse cuenta de que no se puede tener todo (o gran parte) del negocio sobre elementos tecnológicos y no tener un plan o medidas de seguridad que nos permitan tener cierto control sobre nuestra actividad habitual.
Sin embargo, las PYMEs en general no están demasiado concienciadas de este problema y suelen ver con cierto malestar las propuestas de, lo que consideran, un gasto absurdo en seguridad.
Convencer a este sector es todo un reto para los que nos movemos en este mundo, yo me he encontrado con esta situación en no pocas ocasiones y es algo muy complicado de abordar.
Pero también hay que entender que los servicios profesionales en seguridad son caros y que muchas de estas empresas prefieren arriesgarse antes que afrontar el coste de un trabajo serio y profesional que les permita mantener su entorno dentro de unos límites aceptables de seguridad.
Si trabajas en alguna de estas empresas y tienes un rol técnico, si eres el responsable de sistemas, trabajas con la web o simplemente quieres aportar tu granito de arena a concienciar a tus compañeros y te encuentras en algunas de las PYMEs sin dinero (para invertir en seguridad), te quiero aportar cinco sencillos consejos para que la situación de tu empresa sea un poco mejor. Pero antes, para que entiendas lo importante que es esto, no estaría mal que supieras que…
Hace tiempo nos vendían la imagen del hacker malo como alguien encerrado en un cuarto rodeado de cables, generalmente a oscuras, con poca vida social y los ojos rojos de no dormir…
Hoy en día la cosa ha cambiado y cualquiera que tenga un poco de interés por aprender puede hacerse con un manual o realizar una simple búsqueda en Google que le indique paso por paso qué tiene que hacer para fastidiar a la empresa de la competencia.
Pero aún hay más, si estás interesado pero te puede la pereza, sólo tienes que dar un par de vueltas por la deep web o hasta Youtube para encontrar alguien que lo haga por ti a cambio de unos cuantos bitcoins… ¿No te lo crees? ¿Conoces a el Gwapo?
Claro, la situación actual en estas PYMEs es pensar “a mí no me va a pasar”. Es un razonamiento habitual que se convierte en pánico cuando algo ocurre.
Pero volviendo a lo que te contaba, si te encuentras en esta situación en la que la empresa no tiene intención (por economía o decisión) de invertir en seguridad, al menos ten en cuenta estos cinco consejos que te ayudarán (sin apenas gastar un euro) a evitar, al menos, los ataques de botón gordo (aquellos que pueden realizarse sin conocimientos técnicos avanzados).
La primera fase de un ataque sobre tu empresa va a consistir en la búsqueda de información que pueda aportar un mapa de lo que hay tras tu “fachada”.
Tener conocimiento de lo que enseñas es básico para intentar controlarlo y tratar de no ofrecer más de la cuenta. Para hacerlo, puedes usar algunos servicios web que te van a ofrecer una visión de cómo se te ve desde el exterior, como por ejemplo:
– IntoDNS.com: te ofrece un informe de los que tu DNS dice de ti
– DNSQueries.com: te ofrece varias utilidades para conocer información sobre tus sistemas de cara al público (dominio, ips, banners, puertos abiertos…).
BriConsejo: trata de no mostrar banners, logs o servicios que no sean necesarios para tu actividad. Toda la información que no esté estrictamente relacionada con tu negocio, no debe estar expuesta.
En muchas de estas empresas hay problemas incluso para saber si las cosas funcionan o no. Tener un control sobre si tu negocio está operativo es esencial y puedes contar con herramientas sencillas y gratuitas para conseguirlo.
– Nagios / Icinga: dos sabores (el segundo es un fork del primero) para monitorizar de forma interna tus procesos y recursos, con ellos puedes tener todo bajo control
– Monitor.us: servicio de la gente de TeamViewer que monitoriza de forma externa tus servidores, web… y te permite configurar alertas por mail y sms.
BriConsejo: saber qué o cuándo falla tu entorno es vital para poder recuperarse. En función de la actividad de tu negocio el tiempo que puedes permitirte tener algo parado es muy variable y puede ser vital.
Una auditoría de tus sistemas abiertos al público es vital, si tu empresa no quiere o no puede hacerlo con un profesional, al menos puedes utilizar ciertos servicios que te examinan e informan de las vulnerabilidades habituales.
– WebSiteSecurityAudit: examina tu web o servidor en busca de vulnerabilidades y te las muestra ordenadas por prioridad junto con una explicación y consejos para solucionar el problema.
– Detectify: similar pero con la posibilidad de recibir avisos y de exportar informes.
BriConsejo: trata al menos de eliminar las vulnerabilidades graves que te muestran estos servicios. Si ellos las detectan, alguien con mala intención también lo hará.
El espacio en disco está hoy en día casi regalado, no escatimes en backups y si son automáticos mejor (que al final siempre se nos olvida). Una solución híbrida que mantenga copias en local y remoto (puedes usar un disco duro y algún servicio cloud) te permitirá tener todo a buen recaudo por muy poco dinero.
– Cloudberry backup: vale, no es gratis pero son apenas 30€ que te permitirán automatizar tus backups cifrando todo con unos sencillos clicks.
BriConsejo: ni lo pienses, tener tu información a salvo en varios lugares te costará muy poco y será maravilloso haberlo hecho si algún día lo pierdes todo…
Habla con tus compañeros, envíales posts o noticias con incidentes de seguridad, puedes incluso utilizar el kit de concienciación de INCIBE o ponerles algunas de las charlas que te ofrecemos desde esta web.
Piensa que si consigues un pequeño cambio en la mentalidad de la gente, si consigues implantar una mínima cultura de seguridad en una PYME sin dinero habrás tenido éxito.
BriConsejo: al menos, trata de trasladar la necesidad del uso de contraseñas fuertes y de no abrir adjuntos de origen desconocido. Sólo con esto estarás haciendo mucho por tus compañeros.
Ojo, no estoy recomendando estos servicios como alternativas a un trabajo profesional, simplemente aconsejo este tipo de pasos en la situación particular de que te encuentres en una PYME sin dinero (para invertir en seguridad).
Quizás, poner en práctica estos consejos te pueda ayudar a cambiar la mentalidad de los que te rodean. Puede que poner sobre la mesa un pequeño informe con los problemas y soluciones detectados con estos cinco pasos sea el empujón necesario para que se comprenda que la seguridad no es un gasto si no una inversión que termina siendo rentable.
Como siempre digo, si ves algún error, no estás de acuerdo con lo que cuento o quieres hacer alguna aportación, no dudes en pasarte por los comentarios.